Una de las mejores y peores cosas sobre las estadísticas es la variedad de formas que existen para representar los datos. Hay histogramas, diagramas de caja, gráficos circulares y más. Quiero decir, ¿cómo se supone que debes elegir la forma de representar los datos? Una de las maneras más rápidas de representarlos es a través de un gráfico de tallo y hojas. Un gráfico de tallo y hojas es una forma rápida de observar la distribución de datos utilizando los propios valores en lugar de frecuencia o rango. Están separados por decenas y unidades. El tallo son las décimas y las hojas son las unidades.
Los histogramas vienen en dos tipos: frecuencia y frecuencia relativa. Son un tipo de gráfico de barras en el que las barras se tocan y el eje vertical muestra con qué frecuencia ocurre algo. Los gráficos de tallo y hojas son similares a los histogramas en que pueden mostrar tendencias en el conjunto de datos; sin embargo, tienen una ventaja: muestran valores de datos individuales. Los gráficos circulares son diferentes de los otros dos discutidos aquí por dos razones: pueden ilustrar datos cualitativos junto con datos cuantitativos y permiten hacer comparaciones (“partes” con el “todo”).
