A menudo nos preguntamos qué podemos hacer para fomentar el conocimiento en los niños pequeños. La respuesta es bastante simple: el juego. El juego surge de manera natural y espontánea en los niños pequeños. A través del juego, los niños desarrollan habilidades lingüísticas y de razonamiento, comprenden sus emociones, desarrollan la creatividad, mejoran las habilidades motoras y aumentan sus habilidades sociales e intelectuales. Del mismo modo, los niños resuelven problemas a través del juego. Aprenden observando, escuchando, explorando y experimentando. Construyen su propio conocimiento navegando por su entorno. Es fundamental que los niños tengan múltiples oportunidades para explorar objetos a través de los cinco sentidos. Esto creará conexiones en sus cerebros, lo que se traducirá en nuevo conocimiento.
En mi salón de clases, fomentamos el crecimiento de los niños planificando actividades que promueven el aprendizaje a través del juego. Los estudiantes desarrollan habilidades de correspondencia uno a uno y aprenden el concepto de partes y total al trabajar con manipulativos, usar bloques de construcción y completar rompecabezas. También desarrollan coordinación mano-ojo, control de los músculos pequeños e incrementan su capacidad de concentración. Los estudiantes aprenden conceptos matemáticos como tamaño, forma, peso y relaciones espaciales. En Ciencias, comienzan a comprender las propiedades físicas de los objetos, como la textura, el color y la forma. Las interacciones entre estudiantes desarrollan habilidades sociales y emocionales como compartir, esperar el turno, cooperar con otros y desarrollar habilidades para resolver problemas.
Los centros de ABC y Escritura ayudan significativamente a los estudiantes a mejorar sus habilidades motoras finas y establecer conexiones con conceptos matemáticos. Además, estos centros apoyan la discriminación visual de los estudiantes, la expresión de pensamientos en papel y la manipulación de letras. Lo más importante es que sientan las bases para que los estudiantes disfruten de la lectura y la escritura. Los estudiantes tienen la oportunidad de dar forma a su imaginación, desarrollar su creatividad, hacer amistades y mejorar las habilidades para resolver conflictos.
El verano está a la vuelta de la esquina. Por lo tanto, es importante continuar motivando a los niños para que exploren su entorno y aumenten sus conocimientos. En casa, los niños pueden aprender cosas como medición y cambios físicos en la materia cuando ayudan a cocinar o hornear. Pueden aprender sobre el crecimiento de las plantas y sus partes cuando plantan semillas. También pueden practicar contando objetos del hogar, emparejando pares de calcetines, clasificando la ropa y más.
Es sumamente crucial que los padres proporcionen oportunidades para que sus hijos desarrollen su aprendizaje a través de actividades prácticas durante las vacaciones de verano. De esta manera, los estudiantes continúan desarrollando su conocimiento y experiencia incluso si no están en la escuela.
Ms. Terminel
Maestra de PK-3
